Domingo Losada Costoya fue un gran ejecutante al organo, recuerdo su recital en el Organo Joseph Merklin de 1893 de la Catedral de Guadalajara, Jalisco, México en la Década de 1980. En esta ocasión ejecuto inumerables Batallas de Cabanilles y Anónimas y que me dedicó su autobiógrafo del tríptico después de felicitarlo posterior al concierto y que rezitaba con la siguiente leyenda: Para Raimundo con mucho cariño P. Domingo Losada. Muchísimas Gracias Padre Losada por sus ejecuciones tan preciadas e impecables y por difundir la musica iberica tan preciada y por deleitarnos con aquella fantástica velada musical que nos ofreció en Guadalajara y por su notable explicación que daba en cada pasaje de la obra. Queda en nuestro recuerdo de los Tapatios que abrazo con la música Europea en nuestro gran organo.
Siempre le recuerdo. Fue director del coro de San Manuel y San Benito, en Madrid, al que pertenecí a principios del milenio. Aprendí a cantar hermosas alabanzas a Dios. Nunca le olvidaré, fue una gran inspiración.
Domingo Losada Costoya fue un gran ejecutante al organo, recuerdo su recital en el Organo Joseph Merklin de 1893 de la Catedral de Guadalajara, Jalisco, México en la Década de 1980. En esta ocasión ejecuto inumerables Batallas de Cabanilles y Anónimas y que me dedicó su autobiógrafo del tríptico después de felicitarlo posterior al concierto y que rezitaba con la siguiente leyenda: Para Raimundo con mucho cariño P. Domingo Losada. Muchísimas Gracias Padre Losada por sus ejecuciones tan preciadas e impecables y por difundir la musica iberica tan preciada y por deleitarnos con aquella fantástica velada musical que nos ofreció en Guadalajara y por su notable explicación que daba en cada pasaje de la obra. Queda en nuestro recuerdo de los Tapatios que abrazo con la música Europea en nuestro gran organo.
Siempre le recuerdo. Fue director del coro de San Manuel y San Benito, en Madrid, al que pertenecí a principios del milenio. Aprendí a cantar hermosas alabanzas a Dios. Nunca le olvidaré, fue una gran inspiración.