Un comentario

  • Marisa Bernad Asiain

    Qué vacío tan grande nos has dejado Pascual. No ha de pasar ni un sólo día sin recordarte y acordarme de todos los valores que con tanta pasión defendías. Siempre con ilusión por mejorar, trabajador incansable, firme en tus convicciones…Nos queda agradecer a Dios la suerte que tuvimos quienes te conocimos, dar mucho ánimo a tu familia y rezar para sobrellevar tu ausencia.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *